Cómo crear contenido de valor en 5 pasos
Con las redes sociales, tanto grandes empresas como pequeños emprendedores tienen las mismas herramientas para participar en el mercado publicitario. Lo que algunos llaman la “democracia del marketing”. Sin embargo, en el océano de información en el que actualmente navegamos es el contenido de valor publicado en el momento justo, a la hora indicada y en el mejor día posible, es el que destaca y hace la diferencia. Pero, ¿cómo producir contenido de valor? Aquí te dejamos cinco sencillos pasos.
1. CONOCER AL CLIENTE
Conocer lo que quiere tu cliente es indispensable. Esto te ayudará a identificar los aspectos positivos y negativos de tu estrategia de contenidos actual o iniciar una.
Un cliente pasa por tres fases:
Exploración: cuando tiene un problema y busca información para contextualizar su situación.
Consideración: una vez informado ya conoce los enfoques y métodos para resolver su situación.
Decisión: cuando opta por una solución o estrategia y en última instancia puede realizar la compra.
Si sabes en qué parte del ciclo se encuentra, puedes crear un contenido más específico y atractivo.
2. EL PROPÓSITO DE LA ESTRATEGIA.
Una vez sabes a quién te diriges y en qué momento lo haces, debes definir cuál es el objetivo de tu estrategia (atraer a tu web, cerrar una venta, deleitar a potenciales promotores de tu marca).
3. PALABRAS CLAVES
Cuando ya conoces la audiencia y el contexto para el que creas contenido, es el momento de investigar la keywords o palabras claves que buscarían tus clientes potenciales en cada momento.
Usa el lenguaje que ellos emplearían para realizar una búsqueda en internet. Puedes empezar por las tendencias de búsqueda en tu sector, valerte de las redes sociales para indagar y usar alternativas similares de las keywords que encuentres.
4. CONTENIDO QUE GENERE SENSACIONES
Apela a emociones como el humor, miedo, el amor o la felicidad para ‘enganchar’ a la audiencia. Un contenido vulgar, repetitivo y poco pensado no logrará el impacto deseado.
5. CONTENIDO DE VALOR PARA CADA RED SOCIAL
Recuerda que cada red social tiene un tipo de público e intereses diferentes. Generar un contenido y publicarlo idéntico en todas las diferentes redes sociales es un error común. Incluso, hasta en medidas para banners publicitarios, hay grandes diferencias de medidas entre Facebook e Instagram, por ejemplo.
Pinterest e Instagram son redes sociales visuales así que utiliza fotos, videos, infografías, gifs y, sobre todo, considera que tiene gran aceptación entre las mujeres.
Otro ejemplo es LinkedIn. Esta red social es para profesionales. Aquí lo más importante es dar razones y datos duros.
Es relevante que tengas claro que necesitas fijar una estrategia y que la debes aplicar de diferentes formas de acuerdo a la plataforma digital y a la audiencia a la que te dirijas.
Además, estar presentes en redes sociales no es el fin de la empresa, es el medio para crear una comunidad en torno a la marca que te sigue, te comenta y comparte tus publicaciones.
No debes olvidarte de la interacción. Responde a los comentarios, sugerencias, incluso hasta reclamos, siempre será bueno.
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